El año pasado me pasó otra vez, más o menos para esta época. Sí, creo que sí. Abril, mayo..., porque después fue una vorágine y cuando me quise acordar, en menos de 12 hs. la tenía entre las manos. Yo estaba tan asustada que no podía ni tocarla, tanto, que a los pocos días de tenerla, la quería regalar. La cosa es que a penas empezaba a perder el miedo, a conocerla, cuando en un descuido la perdí. Pero la verdad... no estábamos destinadas, lo supe en ese mismo momento. Entonces casi no la lloré... simplemente comprendí que me había apresurado en la elección. Eso de que cada acción tiene una consecuencia.
Por eso ahora que volví a sentir el deseo, me tuve más paciencia. Me senté al lado de mis fantasmas y leí, leí y leí, miré fotos, salí, hablé con otras personas, toqué, disparé, soñé, me escuché, me leí y me puse un límite: entonces la ví.
La primera vez fue casi perisféricamente porque es inevitable no reparar en ella. Y a pesar de que yo mantenía una actitud aparentemente esceptica, ella, recurrentemente volvía a concentrar mi atención y de alguna manera me iba seduciendo.Y cuando de verdad me detuve a verla, me encantó. De todas maneras, me volví una vez más, (casi como seguro paranoico) a mi parte pragmática y me dí más tiempo para leer y rebuscar información, pero lejos de desilusionarme, cada vez se me apareció más perfecta. No puedo dejar de mencionar que casi me distraigo con los beneficios de la combinación peso-tamaño-calidad de otro cuerpo, muy seductor también, pero para terminar de comprarme, ella gana en equilibrio.
Así que... la semana que viene la voy a buscar y me pongo de novia... si ésta me dice que sí... me caso!
Por eso ahora que volví a sentir el deseo, me tuve más paciencia. Me senté al lado de mis fantasmas y leí, leí y leí, miré fotos, salí, hablé con otras personas, toqué, disparé, soñé, me escuché, me leí y me puse un límite: entonces la ví.
La primera vez fue casi perisféricamente porque es inevitable no reparar en ella. Y a pesar de que yo mantenía una actitud aparentemente esceptica, ella, recurrentemente volvía a concentrar mi atención y de alguna manera me iba seduciendo.Y cuando de verdad me detuve a verla, me encantó. De todas maneras, me volví una vez más, (casi como seguro paranoico) a mi parte pragmática y me dí más tiempo para leer y rebuscar información, pero lejos de desilusionarme, cada vez se me apareció más perfecta. No puedo dejar de mencionar que casi me distraigo con los beneficios de la combinación peso-tamaño-calidad de otro cuerpo, muy seductor también, pero para terminar de comprarme, ella gana en equilibrio.
Así que... la semana que viene la voy a buscar y me pongo de novia... si ésta me dice que sí... me caso!
Y parece que te dio el "SI" antes que terminaras de preguntarle !!!
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